Y no, esto no es una charla motivacional; es una invitación para hacerte esas preguntas que quizás no aparecen en tu lista de pendientes, pero que cambian todo. Porque a veces la clave no está en "hacer más", sino en mirar distinto.
Acá va la lista, ¡sin filtro!
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¿Qué fue lo mejor que me pasó este año?
Para que arranques con buena onda, recordá esos momentos que te sacaron sonrisas (o carcajadas). -
¿Qué aprendí sobre mí mismo este año?
Ojo, esto no es una tarea para el terapeuta. Aunque si aprendiste que no te gusta el brócoli, ¡también cuenta! -
¿Qué metas logré que me llenan de orgullo?
Desde correr tu primera maratón hasta sobrevivir la dieta keto. Todo suma. -
¿Qué desafíos enfrenté que me ayudaron a crecer?
Acá no vale hacerse el humilde: reconocer los momentos duros también es parte del balance. -
¿Qué relaciones pude fortalecer?
Llamados inesperados, charlas eternas o el simple “¿cómo estás?” que marcó la diferencia. -
¿Qué hábito quiero dejar atrás antes del 2025?
Ese scroll infinito en TikTok podría estar en la lista (vos sabrás). -
¿Qué momentos me trajeron paz y felicidad?
Sí, repetir esta pregunta dos veces en la lista no fue un error. Porque, ¿quién no quiere más de eso? -
¿Qué decisión tomé este año que impactó positivamente en mi vida?
Decisiones grandes o pequeñas, desde mudarte hasta dejar de discutir en Twitter. -
¿Qué aprendí sobre la gratitud?
A veces se trata de valorar lo que siempre estuvo ahí. -
¿Qué hábito adopté que quiero llevar conmigo al 2025?
Dejar el celular fuera del dormitorio o empezar yoga puede ser más revolucionario de lo que creés. -
¿Qué emoción aprendí a reconocer y aceptar mejor este año?
Spoiler: decir "me sentí vulnerable" no te convierte en débil. -
¿Qué libro, película o canción dejó una huella en mí este 2024?
El soundtrack del año merece una mención especial. -
¿Qué fue lo más valiente que hice este año?
Porque el coraje tiene muchas caras: pedir ayuda, cambiar de trabajo o decir “no”. -
¿Qué sueño dejé de lado y cómo puedo volver a trabajar en él?
Recuperar esos planes olvidados puede ser más emocionante que empezar nuevos. -
¿Qué pequeños momentos cotidianos me llenaron de gratitud?
El sol entrando por la ventana, el olor a café o ese abrazo sin motivo. -
¿Cómo fue mi papel en mis relaciones más cercanas?
Spoiler: las relaciones también son espejo, ¿qué refleja el tuyo? -
¿Qué decisión difícil tomé que ahora agradezco?
Porque muchas veces lo complicado termina siendo lo correcto. -
¿Qué me gustaría perdonarme?
Permitite soltar culpas que ya no suman. -
¿Qué deseo o intención quiero sembrar para el 2025?
No tiene que ser grande, pero que sea auténtico. -
¿Qué le diría a la persona que fui al inicio de este año?
Un poco de compasión (y quizás un "¿viste que todo salió bien?").
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